La presidenta Jeanine Áñez consideró este martes que el expresidente Evo
Morales está rearticulando, desde Argentina, los ataques terroristas en
Bolivia, después de que en los últimos días se atentaron contra varias
torres de comunicación e incluso se secuestró momentáneamente a un grupo
de periodistas.
Pero "al margen de esos ataques terroristas, que se está rearticulando Evo Morales desde Argentina con su gente acá en el país, nosotros no lo vamos a permitir, porque la democracia, lo que hicimos todos los bolivianos por reencauzar nuestro sistema democrático, no lo vamos a poner en riesgo", manifestó la Jefa de Estado, durante la entrega de equipamiento médico e ítems en Tarija.
El pasado 8 de junio se destruyó inicialmente una torre de comunicación en el sector de K'ara K'ara en Cochabamba y ayer se quemó al menos cuatro antenas de empresas telefónicas en distintas localidades de Santa Cruz.
Además, el 11 de junio un equipo de prensa de la Red Unitel y una corresponsal del periódico El Deber fueron agredidos por una turba de manifestantes en Entre Ríos, Cochabamba, e incluso los amenazaron con quemarles vivos.
"No es posible que en un momento de tanta desgracia estén ocasionando casos de terrorismo como lo que ha sucedido (con las) torres de comunicación y como con el secuestró de periodistas para amenazarlos de muerte, eso es ser canalla en un momento tan sensible como el que vivimos", agregó Áñez.
Remarcó que Bolivia, en esta coyuntura de crisis sanitaria, no está para intentos de división o de confrontación porque en situaciones de mucha sensibilidad todos deben colaborar, debido a que el COVID-19 no escoge color político ni condición social.
Pero "al margen de esos ataques terroristas, que se está rearticulando Evo Morales desde Argentina con su gente acá en el país, nosotros no lo vamos a permitir, porque la democracia, lo que hicimos todos los bolivianos por reencauzar nuestro sistema democrático, no lo vamos a poner en riesgo", manifestó la Jefa de Estado, durante la entrega de equipamiento médico e ítems en Tarija.
El pasado 8 de junio se destruyó inicialmente una torre de comunicación en el sector de K'ara K'ara en Cochabamba y ayer se quemó al menos cuatro antenas de empresas telefónicas en distintas localidades de Santa Cruz.
Además, el 11 de junio un equipo de prensa de la Red Unitel y una corresponsal del periódico El Deber fueron agredidos por una turba de manifestantes en Entre Ríos, Cochabamba, e incluso los amenazaron con quemarles vivos.
"No es posible que en un momento de tanta desgracia estén ocasionando casos de terrorismo como lo que ha sucedido (con las) torres de comunicación y como con el secuestró de periodistas para amenazarlos de muerte, eso es ser canalla en un momento tan sensible como el que vivimos", agregó Áñez.
Remarcó que Bolivia, en esta coyuntura de crisis sanitaria, no está para intentos de división o de confrontación porque en situaciones de mucha sensibilidad todos deben colaborar, debido a que el COVID-19 no escoge color político ni condición social.
"Entonces creo que eso nos debería llevar a ver esta desgracia con mayor
solidaridad, (aunque) recibimos exactamente lo contrario y eso es una
lástima; en un momento de crisis, cómo es posible que el evismo tenga
que volver para impulsar la violencia desde el Chapare", lamentó.
ABI
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